(Virgen paraguas)

Bajo al amparo de la virgen encontraremos el consuelo del dolor de lo cotidiano y de la angustia de una muerte que avanza hacia cada uno de nosotros de forma inexorable. ¿por qué no unir estas cualidades tan espirituales a algo tan cotidiano como la protección de la lluvia? La dolorosa nos librará de la molesta constumbre que tienen los dioses de darnos la lluvia un día sí y el otro también, llevándose ella la peor parte, como siempre. Bajo el paraguas de la dolorosa nada puede dañarnos, ni si quiera las miradas atónitas de los paganos transeuntes de la ciudad.